¿Sabes escuchar?
Escuchar, es otra de esascualidades, de las que muchas personas presumen; personas de todo tipo de cultura social o educación, levantan la bandera en favor de su capacidad de escuchar.
Me gustaría preguntar a todas esas personas, si realmente saben lo que significa escuchar…
Hay una actividad muy común en casi todo el mundo, y es la de “predecir” lo que va a decir la persona que tenemos delante, o la de “leer entre líneas” … En ambos casos, si las personas que realizan este tipo de comportamientos acertaran, deberían dedicarse al noble arte de la adivinación.
Sin embargo, al menos que yo sepa, hay pocos adivinos. Quizá, es porque no están fácil predecir lo que una persona va a decir, o porque no están fácil comprender un mensaje subyacente en una conversación.
Es curioso cómo, cuanto más se presume de saber escuchar, menos se escucha.
Esa capacidad de predecir, llega a convertirse en una forma de vida y, cuando falla, siempre suele ser culpa de los demás:
“no se ha expresado bien”, “ha usado palabras inadecuadas”, “no sabe de lo que habla”, etc.
Como todo lo que tenga relación en el comportamiento humano, hay grados y grados; sin embargo, es divertido observar que muchos perfiles relacionados con los maltratos tienen un componente de, no saber, o de no querer escuchar.
¿Será coincidencia?
Saber escuchar, no es solamente estirar la oreja, ponerla de lado y ajustar nuestro gesto facial en un símbolo de interés.
Saber escuchar es un arte, en el que se crea un espacio de comunicación, donde se busca la comprensión y se predisponen los 5 sentidos para captar toda la información posible. Todo ello sin prejuzgar, predecir o adivinar.
Errores muy comunes en una conversación son los siguientes:
• Interrumpir constantemente
• Aportar nuestras opiniones sin tener toda la información
• Juzgar y prejuzgar, pretendiendo imponer nuestras ideas
• Rechazar las palabras del emisor sin tener en cuenta sus sentimientos
• Opinar incluyendo descalificaciones hacia la otra persona
• Dar la vuelta a la conversación y convertirla en “nuestra historia”
• Distraernos y no prestar toda la atención necesaria
La verdad es que, con estos errores en la comunicación, es imposible tener una comunicación. Es así de simple.
Cuando no se entiende algo, se pregunta; cuando algo queda sin información, se pide más; cuando se expone una opinión contraria a la nuestra, se busca la comprensión.
Nuevamente, volvemos a uno de los conceptos que más me gustan, la Inteligencia Emocional y sus grandes bloques, como ya escribí en un artículo anterior:
• La autoconciencia: lo que sentimos en nosotros mismos
• La empatía: lo que sentimos en los demás
• El autocontrol: lo que hacemos en nosotros mismos
• Las habilidades sociales: lo que hacemos en los demás
Leyendo estos bloques, es fácil comprender que, si aplicáramos esto en nuestras conversaciones, todo sería diferente.
Escuchar, es algo que he realizado en mis sesiones de entrenamiento, con las personas que precisan ayuda. Escucho sus palabras, evidentemente, pero también escucho sus tonos de voz, sus miradas, sus silencios y sus gestos; como mi trabajo es comprender, pregunto hasta la saciedad y, cuando todo me queda completamente claro con las palabras que ha dicho la persona que tengo delante, y no con mi imaginación, el proceso de escuchar ha concluido.
Este sistema, aplicado a TODAS las conversaciones del día a día de todas las personas, convertirían nuestro mundo en algo completamente diferente. Hasta es posible que no hubiera discusiones ni malentendidos.
Demasiado bonito para ser verdad.
Como me gusta hablar de realidades y, sé positivamente, que no se puede conseguir que todo el mundo aplique estas técnicas, lo acepto y simplemente lucharé para que, las personas que me rodean, practiquen este sistema y comprueben la efectividad de este método.
En los cursos que he impartido relacionados con la venta, siempre se ha trabajado hasta la extenuación, la capacidad de comprensión de los vendedores, para obtener una información REAL de la persona que tienen delante y poder actuar en consecuencia.
De la misma forma, las personas que han entrenado conmigo la capacidad de escucha (y lo han aplicado a sus vidas), han descubierto que su mundo se ha ampliado exponencialmente, convirtiendo su realidad en algo digno de vivir.
De todo esto, viene ese término tan repetido hoy en día: “Escucha activa”
Es muy bueno que practiquemos y ejercitemos constantemente las técnicas que hemos hablado, ya que, como nadie nos ha enseñado en el colegio a hacerlo de una forma proactiva (otro punto negativo para el sistema educativo), debe salir de nuestro interior querer mejorar, con un proceso de autoconocimiento y desarrollo personal.
Ahora que has leído este artículo, podrás juzgar si sabes escuchar o no. Si es así, enhorabuena !! pero si no es así, te invito a que hables conmigo; estoy convencido que juntos podremos encontrar ejercicios y sistemas de comunicación que te ayuden a hacer crecer tu mundo de forma positiva.
Deja tus opiniones y aprendamos todos juntos.