¿Qué NO es coaching?
Hoy en día, Parece que todo lo que te puede hacer sentir mejor es Coaching, y no es así.
Quiero dejar algo claro antes de “levantar ampollas” y es que, en ningún momento estoy diciendo que estás técnicas de las que voy a hablar sean malas (al menos casi todas), todo lo contrario, son maravillosas pero…. no son Coaching.
En la actualidad, es común escuchar hablar sobre el coaching y cómo puede ayudar a las personas a alcanzar sus metas y desarrollar su potencial. Pero hay que comprender que hay actividades y enfoques que no deben ser confundidos con el coaching.
El gran error de esta sociedad, es que se cree que todo aquello que tenga alguna conexión con el autoconocimiento es Coaching… y no… no es así.
El autoconocimiento es un proceso maravilloso que puede ser trabajado de mil formas diferentes. Una de esas formas es con las herramientas del Coaching, facilitadas por un Coach versado en la materia. Pero no todos los que usan herramientas variadas para el autoconocimiento están usando la técnicas del Coaching. No son malas, seguramente todas son buenísimas, pero esas personas no deben ser consideradas como coach, siendo coach el término usado para la persona que usa las herramientas del Coaching.
Una vez dicho este pequeño trabalenguas, voy a relacionar algunas de estas actividades y después cada persona podrá opinar:
- Los libros de autoayuda: Pueden ser útiles para obtener ideas e inspiración, pero no constituyen una forma de Coaching. Brindan consejos generales que pueden no adaptarse a las circunstancias y necesidades individuales. Son muy buenos si hablamos de temas comerciales, pero no constituyen jamás un proceso de Coaching. Yo he escrito varios, pero aún así, no son libros de coaching, sólo aportan referencias de ayuda a un pensamiento introspectivo, pero nada más.
2. Los memes con frases bonitas: Son agradables y motivadores, pero no son una forma legítima de Coaching. Estas frases suelen ser superficiales y carecen del acompañamiento personalizado y la guía necesaria para lograr un verdadero cambio y crecimiento personal. Yo las uso en mis redes sociales, pero no son Coaching, son 5 segundos de motivación, nada más.
3. Las conferencias de motivación o los discursos energéticos: Suelen resultar inspiradores y emocionantes, pero no son una forma de coaching ya que son un lanzamiento constante de mensajes y recomendaciones, no de preguntas. Estos eventos suelen ser de corta duración y no brindan el seguimiento individualizado y las herramientas prácticas que el coaching ofrece para el desarrollo personal y profesional. Eso sí, son un negocio, aunque la gran mayoría de los asistentes se olvidan de lo escuchado a las 48 horas. Ni todos los coach hacen charlas de motivación y, por supuesto, no todos los que hacen charlas de motivación son coach… (muy pocos). Es muy común escuchar eso de “he estado en una charla de coaching“… y, queridos lectores, una charla, NO es coaching.
4. La meditación: Si bien la meditación es una práctica beneficiosa para la relajación y el bienestar mental, no se puede considerar como Coaching. La meditación se enfoca en el autodescubrimiento y la tranquilidad interior, mientras que el coaching se centra en establecer metas, superar obstáculos y lograr resultados tangibles en diversas áreas de la vida. Me llegaron a decir hace tiempo que hacían coaching mientras meditaban… (o una cosa o la otra, pero las dos a la vez, no lo veo)
5. Actividades energéticas tipo yoga o similares: Actividades como el yoga, la Tai chi o el Qi Gong son excelentes para mejorar la salud física y el equilibrio emocional, pero no son una forma de Coaching. Estas prácticas se centran en el bienestar general y la conexión mente-cuerpo, mientras que el coaching se enfoca en el logro de objetivos específicos y el crecimiento personal. Una vez conocí a una persona que me dijo que hacía Coaching a través del Yoga… (sin comentarios)
6. Actividades de autonocimiento o exploración interna: Como por ejemplo la escritura personal, el journaling o la introspección, son útiles para conocerse a uno mismo, pero no son coaching en sí mismas. Estas actividades no reemplazan la interacción y la guía activa del coach, y me refiero a un Coach versado en los conceptos del Coaching esencial. Estas actividades suelen ser válidas para el autoconocimiento y son estupendas y muy útiles pero, como ya he dicho, eso no es Coaching.
7. La terapia y la psicología: Son disciplinas profesionales que se enfocan en el tratamiento de problemas de salud mental y emocional. A diferencia del coaching, que se centra en el desarrollo personal y profesional. Estas disciplinas abordan temas más profundos y requieren la intervención de un profesional de la salud mental. Hay psicólogos que usan las herramientas del Coaching (pocos) y otros que hablan pestes de nosotros. No voy a entrar en esta guerra, sólo sé que llevo 30 años usando las herramientas del coaching, y será por algo. Cada uno tiene su campo de trabajo y debemos respetarnos mutuamente, sin realizar intrusismo profesional o denigración de conceptos.
8. Los vendedores de humo: Mucho ojo con esto… Si alguien te dice frases como:”si tú quieres puedes” o “te veo muy perdido y yo te puedo solucionar la vida”, corre lo más lejos posible. Son la evidencia clara de su falta de preparación en los conceptos del Coaching. Y aún hay muchos hoy en día, a pesar de la criba de los últimos años en los que fueron desapareciendo tras el boom nacional de esta disciplina. El problema es que ahora salen “disfrazados” usando especialidades como las mencionadas en este artículo. Incluso esas frases las escuché de boca de un director de una conocida escuela de Coaching intentando captar clientes… nuevamente, sin comentarios.
9. Mentoring: Genera orientación y asesoramiento por parte de un experto o profesional, experimentado en un campo específico. Se basa en la transferencia de conocimientos y experiencia del mentor al individuo, brindando consejos y orientación directa. Evidentemente, no es Coaching. Que no quita para que, en ciertos momentos, ese profesional aproveche las herramientas del coaching para lograr algún objetivo concreto, pero es de forma puntual, lo que le sigue aportando la denominación de mentor, no de Coach.
10. Consultoría: Implica el análisis de una situación o problema específico y la provisión de soluciones y recomendaciones especializadas por parte de un experto en un campo determinado. Es un proceso muy directivo y se enfoca en aportar respuestas y soluciones concretas. Lógicamente, muy alejado del Coaching. Al igual que en el Mentoring, que en momentos puntuales use alguna herramienta de Coaching, no implica que pueda decir que realiza Consultorías a través del Coaching. Es un consultor muy cualificado, pero no un coach.
11.Tutorías: Suelen estar relacionadas con la enseñanza y el aprendizaje académico. Implican la guía y el apoyo en el desarrollo de habilidades y conocimientos específicos. Se centran en la transferencia de conocimientos en un campo específico. Nuevamente, muy alejado de los preceptos del coaching. Un coach jamás transmite enseñanzas y conocimientos durante un proceso de Coaching.
12. Asesoramiento: Significa brindar orientación, sugerencias y recomendaciones en situaciones particulares. Los asesores utilizan su experiencia y conocimientos para proporcionar soluciones directas a los problemas. Una vez más, son sistemas diferentes. Si escuchas eso de: “yo te asesoro como coach”… corre. Se aplica la misma puntualización que a los mentores y a los consultores.
13. Sistemas energéticos o magnéticos: Como las pulseras magnéticas o los productos que afirman tener efectos curativos mediante energías sutiles, no tienen relación con el coaching. Estos productos y prácticas se basan en teorías pseudocientíficas y no están respaldados por evidencia científica sólida. Me dijeron una vez que me hacían sesiones de coaching con campos magnéticos. (Aún conservo el miedo que sentí en ese momento…). No niego que funcionen para ciertos temas pero, por favor, no digamos que es Coaching.
Por favor, interioricemos que el coaching es una disciplina profesional con una base teórica y práctica sólida. Si bien las otras actividades mencionadas anteriormente pueden ser útiles y valiosas en diferentes contextos (casi todas), no deben ser confundidas con el coaching.
Dicho todo esto, espero que hayan quedado claros algunos conceptos. Como decía un amigo hace poco tiempo: “hoy todo el mundo es coach”, y es cierto, parece que se acaba una actividad profesional y ante la pregunta de qué hago ahora con mi vida la respuesta es “me hago coach”.
Sé que el tiempo pone a cada uno en su sitio, pero me sigue dando miedo este crecimiento de personas que no saben lo que realmente es, e implica el coaching.
No es de extrañar que a veces me miren como lo hacen algunas personas, cuando digo con voz segura y la cabeza bien alta:
“Soy Coach” (y a mucha honra)